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Opinión. “Obligados a la guerra” Rubén Vilela.

Por el

El Trader vive los conflictos internacionales bajo una doble condición; la de un ciudadano normal sensible a la realidad social y sus injusticias, y la del profesional que se enfrenta a la escurridiza aritmética en tiempos de tensión.

Oriente Medio es un polvorín y los mercados un termómetro constante de la salud del enfermo y los riesgos de contagio. Los Traders, aunque tenemos una actividad sustancialmente diferente a la del común de los ciudadanos que suelen realizarse en profesiones más convencionales, también vivimos con intensidad (quizás incluso mayor) la realidad social de determinados países, y además de sentir la misma repulsa ante situaciones injustas y dolorosas, sufrimos sensiblemente los efectos que se derivan de los conflictos bélicos en nuestra actividad, sobre todo aquellos que se libran en territorios con una potente industria comercializadora en materias primas, siendo el exponente más claro el del petróleo. Las guerras son un absurdo inherente a la naturaleza humana que derivan en actos despreciables y reprobables y que rebajan nuestra condición como seres humanos. Eso es algo que compartimos la mayoría, traders o no, pero es verdad que las tensiones internacionales tienen un constante efecto sobre nuestro trading diario. Es evidente que tensiones en países como Siria, Egipto o el Líbano provocan cambios radicales en el precio del petróleo y de las energías  (que se ven muy afectados) así como observamos que las divisas refugio se fortalecen. Analizada esta realidad estamos obligados a seguir muy cerca, y con preocupación -¿por qué no?- todos los movimientos que se suceden en un clima de tensión, que no son pocos y además suelen ser bruscos. Los traders debemos operar en el mercado con la sangre fría y la entereza profesional, y la objetividad que tendría un cirujano ante un paciente desconocido sobre su mesa, intentando siempre la excelencia en su operación, y dejando para otro momento el juicio, la valoración ética o los sentimientos que le genera la conducta o naturaleza del enfermo. Yo realizo mi trabajo de la mejor manera siempre y para eso la pauta a seguir es escrupulosamente  científica y profesional. Ahora que si me preguntan; a mí -como ustedes, traders o no- las guerras me repulsan. Ellas y la miseria que arrastran consigo.

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Info

First Trader Opening Bell (BSO)

Compuesta por Rafael Febrer para Rubén Vilela